Hoy es, un día de esos mundial. Es el Día de la Radio y en
esas andan los radiofónicos disfrutando y tirando chispas de lo mucho que hace
este medio por la sociedad.
Me gusta la radio, y ese estar escuchando sin tener que
mirar, la variedad, la inmediatez, el adoptar a un locutor como si fuese un
amigo...
Tengo mi casa llena de esos pequeños aparatos, los viejos,
los que con una triste pila funcionaban horas. Los guardo con cariño porque
cuando me pongo melodramática con el tema del fin del mundo siempre pienso que
eso es una de las cosas que no me han de faltar, quiero estar informada las
últimas horas de mi vida.
Luego me imagino que de pasar algo realmente grave de poco
me ha de servir, pero ahí las tengo, junto a navajas multiusos y los cargadores
solares... (Pensamiento: agénciate un par de pedernales)
He recordado esos programas que han marcado tiempos vividos
y la verdad es que algunos casi se pierden en mi memoria, de tan lejanos que
están.
Ya no se ponen pequeñas obras del teatro radiofónico como
era "Matilde, Perico y Periquín" una familia muy de los sesenta, con
sus cuitas en una sociedad que se emocionaba por lo moderno sin dejar lo viejo.
Duró una eternidad, radiofónicamente hablando, y se murió a la vez que una de
sus voces, Pedro Pablo Ayuso.
http://www.youtube.com/watch?v=4Ndt05iVmTY
Se emitía durante la merienda-cena, y el anuncio que la
patrocinaba era el de... "Yo soy aquel negrito del África
tropical..." la canción del Cola Cao tantas veces entonada por... bueno,
por los que ahora tienen una edad.
http://www.youtube.com/watch?v=7ZwXhmTyL9g
Había otros enganches, pero esos ya no me interesaban en lo
más mínimo. Radionovelas, que venían a ser lo mismo que las de ahora, las
telenovelas, pero con imaginación, y eso que te lo ponían muy bien, con todo
tipo de descripciones. Si uno mira como se retransmitía cualquier cosa era muy
gracioso; el locutor tenía, por fuerza, que poner en situación al oyente y no
era tarea fácil. Describir cómo iban vestidos, posturas, caras y demás, en un
concierto de Franco... ¡huy! he dicho concierto, cuando quería decir, una
representación (la edad)
No recuerdo muchos, quizás del mismo estilo "La Saga de
los Porretas" este era por la mañana, justo en esa hora en que ya los
críos estábamos camino del cole, pero que si se podía, se escuchaba, por
gracioso, a su modo, al fin de cuentas era del mismo autor que el de la
anterior familia.
No sé si saltar a tiempos más modernos, porque no recuerdo
bien el nombre de muchos programas que nos marcaron, sobre todo a nivel
musical, en mi caso, los de Club 44, en Radio Popular de San Sebastián, donde
te ponían música realmente nueva y el señor Gálvez, el locutor, era de los
majos, de los que allá por los setenta, cuando llegaron los casettes, dejaba
sin cortes las canciones para que te las pudieses grabar. (Es una entrevista al
señor Gregorio Gálvez)
Alucinantemente era una emisora que se alimentaba del
obispado.
Hubo más sonoridades llamativas, por ejemplo, las de
"Ustedes Son Formidables" con aquél Oliveras que le daba a todo un
énfasis de solidaridad que daban ganas de dar hasta lo que no se tenía. Claro
que era para eso, para dar cuando había una catástrofe.
Ya en tiempos más modernos la radio mañanera acompañó, pero
sin pena ni gloria, la ponía o la quitaba según el que dirigía el cotarro,
quizás el que más tiempo se instaló en la casa fue el de Sardá, con su eterno
señor Casamajor; hubo otras, otros momentos, pero no me acuerdo.
Por las noches, ya en la cama, que no era como ahora que una
se la pasa con la tele encendida hasta las tantas, antes, se iba a la cama a
unas horas decentes y los que somos nocturnos nos la pasábamos viendo la
oscuridad a través de los programas de radio que nos gustaban. Hubo tres que
hicieron posible esto y que sigo recordando con cariño.
El Loco de la Colina fue sin duda alguna uno de los
programas de radio más "acompañosos" del mundo. El Quintero se lo
hizo maravillosamente, con una dulzura y elegancia que ya querrían muchos de
los programas de ahora.
http://www.ivoox.com/loco-colina-audios-mp3_rf_1011553_1.html
Luego llegó el pobre Ferreras que tuvo que lidiar con el
buen gusto que nos había dejado el loco y apareció su Locattini que por lo
menos nos hacía reír. Recuerdo este programa porque cada vez que se abrían los
teléfonos el español aprovechaba para lanzar puñaladas contra los franquistas,
para ir abriendo puertas que con la democracia habían quedado mal cerradas y el
pobre locutor se las tenía que ver con ese odio contenido que por muchas canciones
de "libertad sin ira" que nos cantasen no llegaban a cuadrar...
(No encuentro nada para que os hagáis una idea, lo siento)
El último programa que recuerdo con cariño fue el de Alex,
un tipo que ponía música que me gustaba y traía temas que antes no se habían
escuchado. Relatos de terror en la noche que daban miedo de verdad, o cosas de
fantasmas y aparecidos, que intentaban no parecer relatos, y los ovnis, que se
instalaron en esta España tan aburrida.
Hay más programas que me gustaron, pero la lista sería larga
y el tiempo tampoco es que sobre para leer en lo que pensé nunca me
convertiría, una abuela Porreta, con mi mala leche incluida.
Es por esto que hoy va de enlaces, porque por una vez esto
es mi entradilla y porque muchas veces me gustaría tener una voz bonita, un
tono penetrante para poder hacer que no tengáis que leer... una radio acompaña
más, entretiene, te deja la mirada y las manos libres y además... se queda en
el recuerdo como una buena imagen.
PD: Para los nostálgicos de la radio aquí os paso un par de direcciones…
Tal que vaya encontrando más ya las iré subiendo.
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